En relación al tema de emergencia de salud que aún es noticia mundial cabe resaltar que mucho antes del 23 de abril, fecha en que tuvo acto de presencia por primera vez en nuestro municipio el virus SARS-CoV-2, a través de nuestro coordinador pregonamos e insistimos en la sociedad, la importancia de quedarse en casa. Así mismo desde distintos ámbitos aportamos sugerencias a las autoridades correspondientes para la debida y oportuna implementación de medidas tendientes a menguar la propagación del virus en cuestión.
Al día de hoy se observa un incremento raudo en defunciones y casos positivos confirmados como resultado de acciones tardías, limitadas, que adolecen de congruencia y que solo redundan en mero discurso, mientras el virus va haciendo lo suyo a su paso por Apatzingán.
Es preciso señalar que la ejecución de medidas ineficaces y de aplicación selectiva han generado ya un descontento social en la población, toda vez que mientras algunos comercios de giros no esenciales siguen con cortinas abajo o en el mejor de los casos con una modalidad distinta en sus operaciones, nos hemos percatado de la reapertura de algunos otros, situación que posiciona en entredicho el actuar de nuestras autoridades y que acentúa la brecha existente entre lo que dicen hacer mientras se desagarran sus vestiduras, de lo que verdaderamente realizan.
Es por ello que quienes integramos la Mesa Ciudadana de Seguridad y Justicia, exhortamos enérgicamente con el respeto que se le debe a nuestra autoridad, para que en el marco de actuación tendiente a la prevención y control de la trasmisión del llamado COVID-19, se le dé el tratamiento necesario y de real impacto, a fin de contrarrestar su fácil dispersión entre los que habitamos esta zona de la geografía michoacana y a su vez ello nos permita poder retomar nuestras actividades cotidianas lo mas pronto posible.
